


Tratamiento del Bruxismo con Botox
El bruxismo es una condición en la que se aprietan o rechinan los dientes de manera involuntaria, especialmente durante la noche. Esto puede causar dolor mandibular, cefaleas, desgaste dental, tensión muscular y problemas en la articulación temporomandibular (ATM).
Uno de los tratamientos más innovadores y eficaces para aliviar estos síntomas es la aplicación de toxina botulínica (Botox) en los músculos responsables de la masticación, como el masetero y el temporal.
¿Cómo funciona el Botox en el Bruxismo?
Tratamiento Efectivo
El Botox actúa relajando parcialmente los músculos involucrados en la masticación, reduciendo la fuerza con la que se aprietan los dientes. Esto disminuye la tensión muscular, alivia el dolor y protege la articulación temporomandibular sin afectar la funcionalidad normal de la mandíbula.
Duración del Tratamiento
El efecto del Botox en el bruxismo comienza a notarse a los pocos días y alcanza su máxima eficacia entre 2 y 4 semanas después de la aplicación. Su duración varía entre 4 y 6 meses, dependiendo de cada paciente. Para mantener los resultados, se recomienda repetir el tratamiento periódicamente.
Tratamiento Integral para tu Bienestar
El bruxismo puede afectar tu calidad de vida y salud oral. Con un enfoque personalizado que combine Botox, férula de descarga y, en algunos casos, fisioterapia especializada, es posible aliviar los síntomas y mejorar el funcionamiento de la articulación temporomandibular.
Ventajas del Tratamiento
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Disminuye la tensión y el dolor mandibular
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Reduce la frecuencia e intensidad del rechinamiento dental
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Previene el desgaste dental excesivo
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Mejora la armonía facial al suavizar la hipertrofia del músculo masetero (cara más afinada)
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Alivio rápido y efectivo, con un procedimiento mínimamente invasivo.
Férula de Descarga
Si bien el Botox es un tratamiento muy efectivo para reducir la tensión muscular, se recomienda complementarlo con una férula de descarga. Este dispositivo protege los dientes del desgaste y ayuda a mantener la alineación correcta de la mandíbula, potenciando los beneficios del Botox.
